Su madre lo lleva todos los días a los #EspaciosdeEsperanza en #Baní, porque dice que ese espacio ha sido una verdadera esperanza, no solo para su hijo, sino para toda su familia. Antes de empezar el programa, no respetaba a los mayores y era bien desafiante.
Ahora, su hijo todos los días le lleva un dibujo a cada miembro de su familia y la última vez que fue, sorprendió a su madre diciéndole: “no puedo ser mal criado”.