enero 29, 2019
Globalización 4.0
Listín Diario / Opiniones
Autora: Margarita Cedeño de Fernández
Como ya es costumbre, el Foro Económico Mundial reúne en Davos, Suiza, a las personalidades más influyentes de la escena económica, tecnológica y social de todo el planeta, para abordar los asuntos comunes que guían a la humanidad en su camino hacia un futuro de prosperidad.
Para esta ocasión se ha presentado la fuerte preocupación en torno al lento y desigual crecimiento económico que experimentan las economías mundiales, luego de pasada una década de la gran crisis financiera y económica que destrozó décadas de avances, especialmente en países en vías de desarrollo.
La llamada <<Cuarta Revolución Industrial>> es un concepto acuñado para resaltar la inevitable disrupción de las tecnologías que impulsan la integración de sistemas ciber-físicos, el internet de las cosas y la computación en la nube. El enorme e impostergable reto asociado a esta revolución se hace presente en el impacto de las tecnologías que estamos desarrollando en la desigualdad social, el medio ambiente y el cambio climático; así como el orden internacional y la paz.
En otros momentos de la historia de la humanidad, los grandes cambios tecnológicos si bien han traído medios de generación de bienestar y prosperidad para la humanidad, también han tenido un gran costo social. La quiebra social que puede generarse solo puede ser detenida en la medida en que tanto sector público como sector privado, se ponen de acuerdo para definir normas y reglas éticas que gobiernen la integración del desarrollo tecnológico a la vida en sociedad. El concepto de Globalización 4.0 contempla la búsqueda de una respuesta a 6 grandes preguntas que la humanidad debe abordar con responsabilidad: como cuidar el planeta sin detener el crecimiento económico, la búsqueda del balance entre el nacionalismo y la globalización, como será el concepto del trabajo para el futuro inmediato, de qué manera podemos asegurar que la tecnología sirva para mejorar la vida humana, de qué forma creamos una economía más justa y, finalmente, cómo podemos hacer que los países trabajen juntos en búsqueda de un fin común.
Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Económico Mundial, además de creador del concepto de la 4RI, nos advierte que la humanidad aún no está preparada para dar una respuesta efectiva a esas 6 grandes preguntas. Para él, la clave está en comprender y reconocer que vivimos en <<un nuevo tipo de economía enfocada hacia la innovación>>, y por igual, se requieren <<nuevas normas globales, estándares, políticas y acuerdos que salvaguarden la confianza del público>>.
Comprender el proceso tecnológico y las disrupciones que estamos viviendo es vital para enfrentar lo que Winnie Byanyima de OXFAM ha llamado la <<impactante verdad sobre la desigualdad social de hoy>>, que se manifiesta en que el año pasado la riqueza de los billonarios del mundo creció en un 12 por ciento, mientras que la de los más pobres se redujo en un 11 por ciento.
Para cerrar la brecha existente debemos promover políticas públicas, e impulsar políticas en el nivel privado, que hagan de la Globalización 4.0 un medio para el desarrollo económico y el bienestar social.